imposible anhelo,
te acepto así,
y te amo sin recelo.
Tiras y encoges,
me encierras por sorpresa,
luego, reacción cauta
pareciera torpeza.
Y frustración convertida en rabia
que en indiferencia se expresa.
Dejando mi amor anhelante
sufriendo tu ausencia.
No amarte es la respuesta,
la renuncia, a la que estás dispuesta.
Pero lo dificulta el tenerte cerca.
Así que la resignación,
la espera, y la entrega interna,
parece ser mi objetivo, mi meta.
Me haces mejor persona
y mi, por fuerza, mudo sentir
temporal expresión, que ni a ti te interesa.
¿Cómo puedo amarte tanto ?
¿es un capricho temporal?
¿Eres reflejo de mi inseguridad?
tu no lo alimentas, al contrario lo desalientas.
¿Es una vana obsesión?
¿Es un trastorno mental?
¿Acabare mal?
Olvidarte es lo mejor.
liberarme de esta tensión,
renunciando a ti y a esta opresión.
Sí, la renuncia es la solución.
Hasta que te veo, siento tu presencia,
y veo tu calor.
Entonces nada importa, solo el brillo de tus ojos
y tu sonrisa, y mi imposible amor.
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