#Haiku indiferencia

Indiferencia cruel

aparta lo sentido

¡tendrás que luchar!

Tu luz

¿Suficiente?
tu luz noble me basta estrella polar!
Basta con que estés presente
inalcanzable estrella.
Por lo que sólo puedo admirarte,
bella, noble y justa guía
renunciando agradecido a todo lo demás.

Tu mirada (Otra vez)

El secreto está en tu mirada que me cambia,
mirada que da energía
y que muestra un alma asustada desconfiada y resignada.
Alma que desea ser liberada
como una frágil esperanza,
que vive muere y renace diaramente,
como un fénix maravilloso.
¿Es tu alma o la mía?
¿O la misma alma en conjunción universal?
¿Somos uno o somos dos, o somos todos?
La vida fluye sin freno,
y tu sonrisa la resume fielmente.
Y todo acaba, y todo comienza
y en un instante todo sucede
en tu mirada que me cambia…

Silencio agradecido.

Eres silencio...

Sigo, insisto

pero solo hasta donde aceptes.

Respetuosamente acato el

Limite externo,

en todo somos uno.

Alternativa inaceptable de daño,

nos aleja inexorable.

Así que compartamos este silencio.

en el silencio agradecido de una mirada eterna.

#Haiku

rosa en cuello
Mirada anhelante
Boca rubí

-0-

Silente deseo
Ojos de entrega
¡Amor atrapado !

La soledad de los números primos

"...Los números primos sólo son divisibles por 1 y por sí mismos. Ocupan un sitio en la infinita serie de los números naturales y están, como todos los demás, emparedados entre otros dos números, aunque ellos más separados entre sí. Son números solitarios, sospechosos...
Existe un ciertos números primos mas especiales que el resto, a los que los matemáticos llaman primos gemelos: son parejas de primos sucesivos, o mejor, casi sucesivos, ya que entre ellos siempre hay un nùmero par, que les impide ir realmente unidos, como el 11 y el 13, el 17 y el 19, el 41 y el 43, si se sigue contando se descubre que dichas parejas aparecen cada vez con menos frecuencia. Lo que se encuentra son números primos aislados como perdidos en ese espacio silencioso y rítmico hecho de cifras y se puede tener la angustiosa sensación de que las parejas halladas anteriormente son hechos fortuitos y que el verdadero destino de los números primos es quedarse solos. Pero cuando ya cansados de contar nos disponemos a dejarlo, topamos de pronto con dos gemelos estrechamente unidos. Es convecimiento general entre los matemáticos de que por muy atrás que quede la ùltima pareja, siempre aparecerá otra, aunque nadie pueda prececir dónde.
Mattia pensaba que él y Alice eran eso. dos primos gemelos, solos y pérdidos próximos pero nunca juntos..."
Paolo Giordano. "La soledad de Los Números Primos" . Narrativa Salamandra ISBN 978-84-09838-205-1